Niñeces en aislamiento
Bajo la certeza de que el aislamiento tiene que ser físico y no social, Niñez y Territorio propone este recorrido por las experiencias de cuarentena de nuestros pibes y pibas. Buscando echar por tierra las fronteras que tratan de imprimir con nuestros barrios, acercamos estas voces y miradas atrincheradas. Porque a algunos encierros no se los decreta sino que los trazan las desigualdades.
¿Cómo nos abrazamos en este tiempo? ¿Quiénes abrazan cuando no hay familia que cuide porque no pudo o no quiso o nunca hubo? ¿Cómo será jugar puertas adentro o puertas afuera? ¿Cómo será cuidar cuando falta de todo? ¿Qué sentirá ella cuando se va temprano sin poder quedarse en casa sabiendo que si no está no habrá quién cuide? ¿Qué sentirá ese que sabiendo del riesgo igual decide salir con el carro a circular y circular quién sabe hasta dónde y hasta qué hora, sabiendo del riesgo pero sino no se come? ¿Cómo nos cuidamos sin desamparar a esos pibas y pibes que se quedan solos?El ASPO que se traduce en encierro para las pibas y los pibes que viven en situaciones de pobreza y violencia. ¿Cómo acompañar en tiempos de aislamiento social obligatorio? ¿Qué estás haciendo vos?
Que la precariedad nos cuesta la vida no esnuevo pero empeora en contexto de pandemia porque las condiciones de vida se deterioran aún más. Y el impacto más fuerte de las crisis –la sanitaria, la económica y social es sobre los sectores más frágiles. Hay nuevos pobres y los de siempre están más desamparados.
Terminaba el año pasado con más de la mitad de los chicos y chicas pobres en la Argentina y el 23 % en hogares con condiciones de hacinamiento y sin agua potable ¿Cómo estarán hoy esos pibes y esas pibas hacinados y sin agua?
Denunciábamos la inseguridad alimentaria que llegaba al 35% y el hambre, que más de 4 millones de personas tenían problemas de empleo y dos millones estaban desocupados. Con deuda con el FMI y el endeudamiento también de las economías domésticas, una inflación que fue marcando el alza de precio de alimentos y una caída abrupta de salarios.
Todo eso está peor. Esos que no tenían salario formal se quedaron sin nada. Sin ingreso y sin servicios #Quédate en casa!
¿Quiénes podrán quedarse en casa en esas condiciones? ¿Pensaste cómo será cuidarse sin agua durante días cuando escuchas #lavate las manos, cuidarte depende de vos ¿sentirás bronca o será como escuchar hablar de gente de un mundo ajeno? ¿Cuántas horas de cuidado se le sumaran a los días si hay que ir a buscar agua para lavarse las manos, para comer, para higienizar la casa, bañarse? ¿Cuántas personas tendrán posibilidades de cuidar, acompañar en las tareas de más de un niñe en una casa sin salario sin conectividad y con un solo celular al que se le agotan los datos que se reparten entre 5? ¿Será posible hacer la tarea si tu mamá es trabajadora esencial y se va temprano con el único celular y vuelve a la noche? ¿cómo será ese día para esa nena y esos pibes sin tarea, ni amigos, ni datos, ni educadores para hablar de tanta escasez y soledad? ¿Quién me ayuda?
Niñeces en aislamiento. ASPO, obligatorio que en los barrios populares se traduce en la gorra siempre dispuesta. Otra vez más policía que educadores, que médicos, que enfermeros, que trabajadores sociales. Ellos gestionando la cuarentena, la violencia y la vida de los pibes y las pibas de los barrios más pobres. En esta fase el problema son los pobres y no las precariedades y la respuesta es el encierro. ¿Cómo era antes la vida de las pibas y los pibes más pobres de la Argentina? El encierro no es nuevo, no son nuevas las fronteras ni la violencia. Tampoco es nueva la indiferencia. LA DISTANCIA DEL NO ABRAZO
El Covid – 19 profundiza y reproduce las desigualdades porque impacta más en territorios marcados por el hacinamiento, la falta de servicios públicos básicos, la mal nutrición persistente, la precariedad de los servicios de salud y educación y la informalidad del trabajo.
Desde nuestras organizaciones redoblamos los esfuerzos para que no se instale el hambre en nuestras barriadas y sabemos que el hambre no es solo de panza. En esta realidad tan difícil la comunidad organizada es la que abraza e invita a soñar.